Por: Alessandro Lanata
Lo bueno:
Es una buena fuente de fosforo el cual es un elemento esencial en nuestra salud pues forma parte del ADN. Es utilizado para el almacén y transporte de energía como adenosín trifosfato o ATP (Siglas en ingles). Además es una muy buena fuente de proteína y calcio.
Lo malo:
Tiene alto contenido de grasas saturadas de cadena larga las cuales son perjudiciales para la salud.
Contiene alto contenido de sodio, el cual, en exceso, contribuye a la retención de líquidos.
Es considerado medianamente inflamatorio por lo que se debe de comer con moderación.
En general:
El queso parmesano, como la mayoría de lácteos, debe ser consumido con moderación ya que contribuye a una dieta acidificante y pro-inflamatoria.